El Senado de Arizona ha marcado un hito en la historia legislativa del estado al aprobar, este miércoles, la derogación de una ley que ha mantenido una prohibición casi total del aborto desde 1864. Con el apoyo bipartidista, los demócratas lograron avanzar con esta medida, eliminando una normativa que había generado intensos debates y tensiones en la sociedad arizonense.
La legislación, heredada de la época de la Guerra Civil, establecía duras penas de prisión de dos a cinco años para cualquier mujer que se sometiera a un aborto, así como para quienes la asistieran. Esta normativa, que solo contemplaba una excepción en casos de grave peligro para la vida de la gestante, había sido restablecida recientemente tras una decisión de la Corte Suprema de Arizona en abril.
El proyecto aprobado este miércoles no solo deroga esta ley obsoleta, sino que también introduce disposiciones más contemporáneas. En su lugar, se implementará una normativa aprobada en 2022 por la misma legislatura estatal, que permite el aborto hasta las primeras 15 semanas de embarazo y contempla excepciones en casos de violación, incesto o riesgo para la vida de la madre.
El destino de esta nueva legislación ahora descansa en manos de la gobernadora de Arizona, Katie Hobbs, quien se espera que firme el proyecto de inmediato. Sin embargo, la antigua ley de 1864 podría mantenerse vigente por algunas semanas más, ya que la nueva normativa no entraría en vigor hasta 60 días después del cierre de la presente sesión legislativa y su firma por parte de la gobernadora.
El restablecimiento de la ley de 1864 fue percibido como un revés para los derechos reproductivos de las mujeres en Arizona, pero también ha generado reacciones en el ámbito político. Algunos candidatos republicanos se han visto enfrentados a este tema, mientras que grupos defensores de los derechos reproductivos han intensificado sus esfuerzos para revertir estas restricciones.
La derogación de la ley antiaborto de 1864 representa un paso significativo hacia la protección de los derechos de las mujeres en Arizona. Sin embargo, el debate sobre el aborto y los derechos reproductivos sigue siendo un tema de gran controversia y división en la sociedad, y es probable que continúe generando discusiones y acciones en el futuro cercano.