En un giro inesperado que ha paralizado la actividad aérea en Quintana Roo, el huracán «Beryl» ha provocado la cancelación de 284 vuelos en el Aeropuerto Internacional de Cancún. Este jueves, Mara Lezama, gobernadora del estado, anunció las medidas de emergencia adoptadas debido a la intensificación del huracán, que ha escalado de categoría 2 a 3 en las últimas horas, según la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
El Grupo Aeroportuario de Sureste (Asur), encargado de la operación del aeropuerto, detalló que 142 de los vuelos cancelados eran llegadas y los otros 142, salidas. Esta medida preventiva busca proteger a los pasajeros y al personal aeroportuario ante las peligrosas condiciones meteorológicas que trae consigo «Beryl».
A través de un mensaje en redes sociales, la gobernadora Lezama hizo un llamado a la población para que evite acudir a los aeropuertos en busca de refugio. «Los aeropuertos no fungen como refugios», destacó, instando a los ciudadanos a seguir las indicaciones de Protección Civil y buscar refugios oficiales.
Además del aeropuerto de Cancún, el aeropuerto de Tulum ha suspendido sus operaciones desde las 2:00 de la tarde del jueves hasta el mediodía del próximo domingo. Las autoridades aeroportuarias de Tulum emitieron un comunicado pidiendo a los turistas afectados por la cancelación de vuelos que no se presenten en la terminal aérea, subrayando que no está preparada para funcionar como refugio en caso de huracán.
En Cancún, la actividad no ha cesado, con un incremento en la movilización para resguardar embarcaciones turísticas. Muchas de estas fueron trasladadas a los canales de la laguna Nichupté, donde los manglares ofrecen protección contra los vientos huracanados. Este puerto seguro para embarcaciones menores es vital para prevenir daños significativos en la flota turística local.
En las últimas horas, «Beryl» ha modificado su trayectoria, moviéndose más al norte de Tulum y alejándose de Quintana Roo. Sin embargo, la amenaza persiste para el balneario de Tulum, conocido por su histórica zona arqueológica. Se espera que el huracán impacte directamente en esta área, poniendo en alerta máxima a las autoridades y a la comunidad local.
Las aerolíneas han respondido rápidamente a la crisis, ofreciendo opciones a los pasajeros afectados. Volaris, por ejemplo, ha informado que los usuarios con vuelos cancelados recibirán un correo electrónico con tres opciones: reembolso total, cambio de fecha sin costo adicional o un voucher por el 125% del valor de la compra. Aquellos cuyos vuelos no hayan sido cancelados pero no puedan trasladarse al aeropuerto, pueden solicitar asistencia a través de WhatsApp.
Por su parte, Viva Aerobús también ha ofrecido las mismas tres opciones a sus pasajeros y ha proporcionado un enlace en su página web para gestionar las afectaciones climáticas. Estas medidas buscan mitigar el impacto de las cancelaciones y ofrecer soluciones rápidas y efectivas a los usuarios.
Las autoridades de Protección Civil han insistido en la importancia de mantenerse informados y seguir las recomendaciones oficiales. Han subrayado la necesidad de evitar desplazamientos innecesarios y de estar preparados para cualquier eventualidad. La seguridad de los residentes y turistas es la prioridad en estos momentos de incertidumbre.
La situación ha generado una serie de reacciones entre los afectados. Javier Gómez, un turista español, expresó su frustración pero también su comprensión: «Es una situación complicada, pero entiendo que es por nuestra seguridad». Por otro lado, Ana Rodríguez, residente de Cancún, manifestó su preocupación por el impacto del huracán en la economía local: «El turismo es nuestra principal fuente de ingresos. Espero que todo vuelva a la normalidad pronto».
El huracán «Beryl» ha trastocado significativamente las operaciones aéreas en Quintana Roo y las autoridades han tomado medidas drásticas para garantizar la seguridad de todos, y las aerolíneas han ofrecido alternativas para mitigar el impacto de las cancelaciones. La comunidad está llamada a mantenerse alerta y seguir las indicaciones de Protección Civil para enfrentar esta emergencia climática con responsabilidad y precaución.