La mañana de este viernes, una avioneta que realizaba tareas sanitarias se desplomó en el Ejido Pavencul, en el municipio de Tapachula, Chiapas. El incidente cobró la vida de tres personas que participaban activamente en los esfuerzos por frenar el avance del gusano barrenador, una plaga que afecta gravemente al ganado.
De acuerdo con el reporte oficial de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), la aeronave involucrada fue una L-410 UVP-E, que cayó aproximadamente a las 8:15 de la mañana. La avioneta formaba parte de un operativo de control biológico que tenía como objetivo la liberación de moscas estériles en zonas estratégicas para contener la propagación de la plaga, cuya reaparición en territorio mexicano ha encendido alertas sanitarias.
Protección Civil del estado confirmó el desplome a través de sus redes sociales y activó los protocolos correspondientes. Tras recibir el reporte, se notificó al Centro de Control, Comando, Comunicación, Cómputo y Contacto Ciudadano (C5) y a la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC), quienes se movilizaron hacia el sitio del accidente junto con personal de Protección Civil para asegurar el área y comenzar con las diligencias necesarias.
En un mensaje compartido en redes sociales, el titular de SADER, Julio Berdegué, lamentó profundamente el fallecimiento de las tres personas que viajaban a bordo de la aeronave. “Lamentamos el fallecimiento de Carlos Eduardo Monroy, Byron Eduardo Moran y Lucio Alberto Roblero, quienes comprometidos con su trabajo para combatir la plaga del gusano barrenador del ganado sufrieron un accidente”, escribió el funcionario.
Los reportes preliminares señalan que los tripulantes eran un ingeniero mexicano y dos pilotos guatemaltecos, quienes participaban en esta misión como parte del plan de contingencia nacional contra el gusano barrenador. Su labor se enmarcaba dentro de una estrategia binacional ante una amenaza sanitaria que, desde su reaparición a finales de 2024, ha provocado la suspensión temporal de exportaciones de ganado hacia Estados Unidos desde el pasado 11 de mayo.
El gusano barrenador fue erradicado en México en 1991, pero su reciente regreso representa un riesgo importante para la sanidad animal. Esta larva puede infectar heridas abiertas en el ganado, provocando infecciones graves y pérdidas económicas significativas.
Las autoridades federales han notificado oficialmente el accidente a las instancias correspondientes para iniciar una investigación que permita esclarecer las causas del desplome. Hasta el momento, no se ha emitido ningún pronunciamiento por parte del gobernador de Chiapas, Eduardo Ramírez Aguilar. El siniestro ha generado conmoción entre los sectores agropecuarios y de aviación, así como un llamado a reforzar las condiciones de seguridad en las operaciones aéreas asociadas a campañas de sanidad animal.