Funcionarios de la alcaldía encaran a manifestantes que se reunieron frente a la casa de la alcaldesa para protestar por esta medida.
Un grupo de personas que protestaba por la prohibición para realizar bailes en el Kiosko Morisco fue enfrentado por funcionarios de la alcaldía Cuauhtémoc.
Entre jaloneos y empujones los funcionarios tomaron equipos de sonido. Se encararon con vecinos y paseantes que tomaron una calle para bailar y exigir que se permita esta actividad.
El conflicto comenzó hace dos semanas, cuando funcionarios locales impidieron los bailes que se realizan los días domingo y que pueden congregar a decenas de personas en una zona ampliamente visitada de la Ciudad de México.
El argumento oficial
La alcaldesa Sandra Cuevas dio una conferencia de prensa en su casa, que está frente al parque donde se realizan los bailes.
Dijo que no permitirá el regreso de los grupos de sonido. Argumentó que es una medida para proteger los derechos humanos de los vecinos y de quienes visitan la zona.
No se puede privilegiar el derecho de unos y violentar el derecho de miles de personas.
Dijo que las personas que quieran bailar pueden ir al deportivo Cuauhtémoc o a la Casa de Cultura que están cerca.
En un comunicado previo afirmó que los grupos sonideros toman irregularmente la alameda, pues alteran la tranquilidad, seguridad y convivencia de quienes habitan en la colonia.
Sostuvo que los grupos ‘se cuelgan’ del circuito eléctrico, “lo que provoca, cada ocho días, un corto circuito en luminarias y faroles”.
Acusó al gobierno de la ciudad, en particular a la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, de estar detrás de la convocatoria a la protesta.
La mañana de este domingo, el secretario general de Gobierno, Martí Batres, dijo que la administración “no avala la realización de protestas frente a domicilios de funcionarios o particulares. Debe respetarse la esfera personal de cada quien. Por lo tanto, no avala la protesta convocada frente al domicilio de la alcaldesa Sandra Cuevas y hace un llamado a no realizarla”.
La protesta
Este domingo un grupo de personas se presentó frente a la casa de la alcaldesa para manifestarse, porque según su postura el gobierno local “busca prohibir la tradición de bailar que se lleva a cabo desde hace 12 años en el kiosko Morisco”.
Un reporte de Corriente Alterna dice que un vecino presta la instalación eléctrica para el ‘Sonido Sincelejo’ que encabeza Joel García.
García buscó un permiso para seguir realizando los bailes de los domingos, pero solo le ofrecieron autorización para realizarlos en el Deportivo local o a la explanada de la alcaldía.
Entre vecinos y comerciantes predomina la idea que el cambio se debe a que la alcaldesa ahora vive frente al parque donde se realizan los bailes, apunta el reporte de Corriente Alterna.