Tras un intenso operativo de búsqueda, la Guardia Costera de los Estados Unidos confirmó que los tripulantes del sumergible Titán murieron por implosión de la nave, luego de que se hallaron restos cerca del área donde se encuentra el Titanic.
Ante las evidencias, el contraalmirante del servicio de Guardacostas, John Mauger, transmitió el pésame a las familias de los fallecidos.
A bordo viajaban el millonario británico Hamish Harding, presidente de la compañía Action Aviation; el paquistaní Shahzada Dawood, vicepresidente de Engro, y su hijo Suleman -ambos también con nacionalidad británica-; el experto buceador francés Paul-Henri Nargeolet; y Stockton Rush, director general de OceanGate Expeditions, la compañía que opera el sumergible, y que cobraba 250,000 dólares por turista.
En la mañana de este jueves, un ROV, un vehículo a control remoto, encontró la cola cónica del sumergible en el lecho marino a menos de medio kilómetro del Titanic, explicó Mauger en una conferencia de prensa.
Poco antes, los Guardacostas anunciaron el hallazgo de un “campo de restos”, que debían ser evaluados por los expertos.
La búsqueda, en la que participaron barcos, robots y aviones, había entrado el jueves en una fase crítica una vez transcurridas las 96 horas de oxígeno de emergencia de que disponía el sumergible Titan de la empresa OceanGate Expeditions.