Ozzy Osbourne, leyenda indiscutible del heavy metal y voz emblemática de Black Sabbath, falleció a los 76 años “rodeado de amor”, según confirmó su familia en un comunicado difundido este martes. “Con más tristeza que las palabras pueden expresar, tenemos que informar que nuestro querido Ozzy Osbourne falleció esta mañana. Estaba con su familia y rodeado de amor. Pedimos a todos que respeten la privacidad de nuestra familia en este momento”, expresó el mensaje.
La noticia sacudió al mundo del rock, que este mismo mes lo había visto despedirse de los escenarios en su ciudad natal, Birmingham. En un evento titulado Back to the Beginning, el pasado 5 de julio, Osbourne se reunió con Black Sabbath para un concierto multitudinario en el estadio del Aston Villa. Entre los invitados estuvieron bandas como Metallica y Guns N’ Roses. Esa noche, conmovido por el momento, dijo que no planeaba volver a actuar en directo, aunque no descartó seguir grabando música en estudio.
John Michael Osbourne nació el 3 de diciembre de 1948 en Aston, Birmingham. Dejó la escuela a los 15 años y tuvo varios trabajos ocasionales hasta que se reencontró con su amigo del colegio Geezer Butler, con quien formó varias bandas. En 1968 nació Black Sabbath, grupo que revolucionó el panorama musical con su álbum debut homónimo lanzado en 1969. La portada oscura y el sonido denso del disco fueron un cambio radical respecto a la estética hippie dominante de la época. Fue comparado con “el Big Bang del heavy metal”.
Su segundo álbum, Paranoid, consolidó su lugar en la historia del rock. Contenía temas que se convertirían en himnos del género como War Pigs, Iron Man y la propia Paranoid, considerada la canción emblemática de la banda. Ambas producciones figuran entre los 10 mejores álbumes de heavy metal de todos los tiempos, según votación de los lectores de Rolling Stone.
Ozzy, tanto en su faceta como líder de Sabbath como en su carrera solista, definió y redefinió el heavy metal. Su presencia escénica, su estilo rebelde y momentos infames como el mordisco a la cabeza de un murciélago, lo convirtieron en un ícono cultural. Más adelante, mostró otra cara como padre de familia en el exitoso reality The Osbournes, donde se ganó el cariño de nuevas generaciones.
Desde 2020, se sabía que Osbourne padecía la enfermedad de Parkinson, diagnóstico que hizo público tras una caída que afectó gravemente su salud.
Las reacciones tras su muerte no tardaron en llegar. Black Sabbath publicó una imagen del artista en Instagram con el mensaje: “Ozzy para siempre”. Ronnie Wood, de los Rolling Stones, recordó su último show como “maravilloso”. Brian May, guitarrista de Queen, lo describió como “una manera gloriosa de decir adiós” y compartió que pudo hablar con él en privado tras el espectáculo.
Metallica lo homenajeó con una foto conjunta acompañada de un corazón roto. Rod Stewart se despidió con cariño: “Adiós Ozzy, descansa, amigo mío, te veré allí arriba, mejor tarde que pronto”. Tom Morello escribió: “Que Dios te bendiga Ozzy”, mientras que Chad Smith (Red Hot Chili Peppers) y Travis Barker (Blink-182) compartieron imágenes personales con el cantante.
La banda Pantera también le dedicó unas palabras: “Gracias por todo lo que hiciste por el metal y Pantera. No estaríamos aquí si no fuese por ti”.
Con su partida, Ozzy Osbourne deja un legado monumental. Pionero del metal, ícono rebelde, figura entrañable de la cultura pop y símbolo de una generación. Su rugido se apaga, pero su voz retumbará para siempre en los amplificadores del mundo.