En medio de una crisis diplomática sin precedentes, México rompe relaciones con Ecuador después de que policías ecuatorianos irrumpieran en la Embajada Mexicana en Quito en busca del exvicepresidente Jorge Glas, solicitante de asilo. Esta acción ha desatado una ola de respuestas por parte de líderes políticos y gubernamentales en México, incluidos los candidatos presidenciales, quienes han expresado su posición sobre el conflicto.
Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, denunció la violación flagrante del derecho internacional y la soberanía de México, calificando los hechos como inaceptables. En línea con esta postura, la canciller Alicia Bárcena anunció el rompimiento inmediato de relaciones diplomáticas con Ecuador.
Las reacciones de los candidatos presidenciales han sido contundentes. Claudia Sheinbaum, abanderada de Morena, mostró su solidaridad con el presidente López Obrador, condenando la afrenta a la diplomacia y el derecho internacional.
Por su parte, Xóchitl Gálvez, candidata del PAN,PRI,PRD, afirmó que las sedes diplomáticas son inviolables, mientras que Jorge Álvarez Máynez, representante de Movimiento Ciudadano, señaló el acto como un atentado contra la soberanía de México.
El excanciller Marcelo Ebrard respaldó la decisión de López Obrador de suspender relaciones diplomáticas con Ecuador, destacando la gravedad de la acción ecuatoriana y su impacto en la soberanía nacional.
Claudia Ruíz Massieu, exsecretaria de Relaciones Exteriores, condenó enérgicamente la irrupción en la embajada mexicana, enfatizando que es una violación grave al derecho diplomático que debe ser condenada por la comunidad internacional.
Ana Lilia Rivera, presidenta del Senado, exigió respeto a la soberanía de México y la integridad de su embajada en Ecuador, considerando el acto como una violación a la Convención de Viena.
Además, 22 gobernadores de estados mexicanos respaldaron la decisión de López Obrador de romper relaciones diplomáticas con Ecuador y exigieron el retorno seguro de los diplomáticos mexicanos en el país sudamericano. Firmaron un documento expresando su apoyo total al presidente y anunciando su respaldo a las medidas que adoptará México ante organismos multilaterales.
Esta declaración conjunta, firmada por gobernadores de diversos estados mexicanos, refleja la unidad nacional en torno a la defensa de la soberanía y la dignidad del país ante una situación de extrema gravedad en el ámbito diplomático.
La postura unificada de los líderes gubernamentales y políticos mexicanos subraya la importancia de proteger los principios fundamentales del derecho internacional y la inviolabilidad de las sedes diplomáticas, mientras se busca una resolución adecuada y justa a esta crisis.