La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo respondió con determinación a las declaraciones del presidente estadounidense Donald Trump respecto al cumplimiento del Tratado de Aguas de 1944, documento binacional que regula el intercambio de agua entre México y Estados Unidos desde hace más de ocho décadas.
Desde su cuenta oficial en la red social X, Sheinbaum confirmó que su administración ya envió una propuesta integral al subsecretario del Departamento de Estado de EE.UU., con el fin de atender el tema del agua destinada a Texas en el marco del tratado. El documento contempla acciones inmediatas para dar seguimiento a este compromiso internacional.
En su publicación, la presidenta subrayó que “México ha estado cumpliendo, en medida de lo posible”, en referencia a los compromisos establecidos, destacando además las afectaciones que ha generado la sequía severa que atraviesa el país desde hace tres años. “Estoy segura que, como en otros temas, se llegará a un acuerdo”, puntualizó.
A través de la Comisión Internacional de Límites y Aguas, ambos países han sostenido trabajos técnicos con el objetivo de encontrar soluciones viables y equitativas, en un contexto marcado por la escasez hídrica y los retos ambientales.
Sheinbaum también dio instrucciones a los titulares de las secretarías de Agricultura y Desarrollo Rural, Relaciones Exteriores, y Medio Ambiente y Recursos Naturales, para establecer contacto con sus contrapartes estadounidenses. El objetivo: avanzar de manera conjunta en la definición de acciones concretas y mantener una cooperación binacional activa.
Las declaraciones del presidente Trump se difundieron este jueves en su red Truth Social, donde afirmó que México «le debe a Texas 1.3 millones de acres-pies de agua según el Tratado de Aguas de 1944, pero desafortunadamente México está violando su obligación en virtud del Tratado».
Según el acuerdo firmado en 1944, México debe entregar a Estados Unidos un total de 1.75 millones de acres-pie de agua cada cinco años, proveniente del Río Bravo. Esta cantidad, medida en unidades que representan el volumen necesario para cubrir un acre de superficie con un pie de agua, equivale a llenar casi 875 mil albercas olímpicas a lo largo del periodo pactado.
Las tensiones sobre este recurso estratégico crecen en una etapa crítica para ambos países, donde el cambio climático y la sobreexplotación han comenzado a impactar los equilibrios hídricos regionales. La respuesta de México, liderada por Sheinbaum, se enmarca en una postura diplomática y colaborativa, buscando preservar los acuerdos históricos y asegurar un manejo responsable del agua.