Al menos ocho personas han fallecido tras el paso de Beryl, una tormenta tropical degradada que tocó tierra en Estados Unidos el lunes 8 de julio, inicialmente como huracán. Actualmente, 2.3 millones de personas se encuentran sin suministro eléctrico en una extensa área que abarca la ciudad de Houston.
Además de causar destrozos en viviendas, infraestructura y árboles debido a sus intensos vientos, Beryl provocó inundaciones, marejadas y varios tornados, exacerbando la situación más allá de Texas. De acuerdo con informes oficiales, las muertes han sido atribuibles a diversos incidentes relacionados con la tormenta, y una vasta región del sureste de Texas sigue sin energía, en medio de una ola de calor récord pronosticada para la segunda semana de julio.
Entre las víctimas, al menos dos personas murieron por la caída de árboles. En Houston, un empleado civil del Departamento de Policía falleció atrapado en una inundación en una avenida. En Luisiana, otra persona perdió la vida por la caída de un árbol, presuntamente debido a un tornado cerca de Benton. Las autoridades advierten que el número de fallecidos podría aumentar mientras continúan los esfuerzos de búsqueda y rescate.
La compañía energética CenterPoint Energy, que atiende a los condados Harris y Fort Bend, espera restablecer el servicio eléctrico a un millón de clientes en Texas para el miércoles 10 de julio. Hasta el lunes 8, el suministro se había recuperado para menos de 300,000 clientes, una cifra pequeña pero significativa tras el desastre.
Texas enfrenta temperaturas cercanas a los 40 grados centígrados, complicando la situación sin aire acondicionado para los afectados por el apagón. En el oeste de EE.UU., alrededor de 40 millones de personas soportarán temperaturas superiores a los 100 grados Fahrenheit en los próximos siete días, según el Servicio Meteorológico Nacional (NWS).
Aunque las autoridades texanas advierten que el número de muertos podría aumentar debido a los estragos, inundaciones y otras repercusiones de Beryl, los efectos devastadores de la tormenta se pueden observar en numerosos videos e imágenes que circulan en redes sociales.