El ambiente en Boulder, Colorado, se transformó radicalmente este domingo tras un ataque violento ocurrido durante una manifestación pacífica. El FBI confirmó que investiga el c como un “ataque terrorista”, mientras medios locales y autoridades reportaron la presencia de múltiples víctimas tras una agresión con bombas molotov en pleno bulevar comercial de la ciudad.
El evento afectado, conocido como Boulder Run for Their Lives, congrega semanalmente a miembros de la comunidad judía que se reúnen para caminar en solidaridad con los rehenes israelíes aún retenidos por Hamás. Lo que se había desarrollado como una jornada conmemorativa fue abruptamente interrumpido por una explosión que, según testigos citados por CBS News, fue originada por un individuo que lanzó artefactos incendiarios de forma deliberada contra los asistentes.
El director del FBI, Kash Patel, compartió el primer comunicado oficial a través de su cuenta en X: “Estamos al tanto de un atentado terrorista deliberado (…) nuestros agentes y las fuerzas del orden locales ya se encuentran en el lugar”. Agregó que la información continuará fluyendo conforme avance la investigación, sin ofrecer todavía cifras ni detalles sobre las víctimas.
La Policía de Boulder, por su parte, también confirmó la emergencia en la zona del ataque, indicando que se trataba de una escena con múltiples afectados y un despliegue inmediato de personal de emergencia. Las autoridades trabajan en asegurar el perímetro, atender a los heridos y recolectar pruebas para determinar la identidad del responsable.
La Liga Antidifamación, organización judía que monitorea actos de odio, emitió una declaración de alerta desde la misma red social: “Estamos al tanto de los informes de un ataque en el evento Boulder Run for Their Lives de hoy”. La agrupación ha seguido de cerca el desarrollo del conflicto entre Israel y Hamás, y ha advertido sobre el aumento de expresiones violentas en territorio estadounidense desde octubre de 2023.
Este hecho se produce en un contexto nacional tenso. Hace apenas unas semanas, un hombre de origen estadounidense fue detenido por el asesinato de dos empleados de la embajada de Israel en Washington, un acto que también generó preocupación por los riesgos de violencia política y religiosa dentro del país.
La comunidad judía en Boulder ha mantenido sus caminatas semanales como un gesto simbólico de unidad y recordatorio por los secuestrados. Sin embargo, el ataque de este domingo pone en evidencia un clima cada vez más cargado de confrontaciones relacionadas con la guerra en Gaza y las posiciones encontradas que existen sobre el conflicto.
Las autoridades locales, federales y los cuerpos de emergencia continúan en labores de investigación para esclarecer el motivo, capturar al autor y brindar seguridad a una ciudad que quedó sacudida por un evento inesperado y cargado de simbolismo.
En las próximas horas se espera la confirmación oficial sobre el número de víctimas, su estado de salud y el avance del proceso judicial. Mientras tanto, la atención se mantiene en Boulder, donde lo que comenzó como una caminata de paz terminó envuelto en llamas, miedo y conmoción.