A través del editorial Desde la Fe, la Iglesia Católica ha instado a la sociedad a brindar apoyo a Acapulco tras el impacto del huracán Otis.
Han señalando la falta de servicios básicos en la zona y haciendo hincapié en la importancia de no sucumbir a la desinformación ni a la polarización social.
Enfatizaron que la reconstrucción de Acapulco es una responsabilidad que involucra a toda la sociedad mexicana, subrayando la importancia de mostrar unidad y solidaridad en este momento de crisis.
El objetivo es no solo devolver el esplendor turístico perdido, sino también mejorar las condiciones de vida de sus residentes, abogando por una reconstrucción integral que no se centre en colores políticos o beneficios selectivos.
La Iglesia también abordó la necesidad de reconstruir el tejido social y establecer estrategias efectivas para combatir la inseguridad y la violencia.
Resaltó que sin estas condiciones, la recuperación del turismo será un desafío. Se recordó que la violencia y la inseguridad han opacado el atractivo de Acapulco en los últimos años, colocándola en listados de las ciudades más violentas a nivel mundial.
Asi mismo se mencionaron aspectos específicos que han afectado el turismo, como las cancelaciones de habitaciones hoteleras relacionadas directamente con la ola de violencia, así como cuestiones de salubridad, como el ranking de playas con alta concentración de bacterias en el agua, donde Caletilla, una de las playas emblemáticas de Acapulco, ocupó un lugar destacado.