En un acto cargado de simbolismo y humanidad, Samara Martínez, activista y paciente con enfermedades crónicas degenerativas, presentó en la Cámara de Diputados la iniciativa “Ley Trasciende”, una propuesta que busca reconocer el derecho a una muerte digna en México. Acompañada por representantes de colectivos ciudadanos y legisladores de Movimiento Ciudadano, Morena y Partido del Trabajo, Martínez expuso la urgencia de una legislación que permita elegir cómo enfrentar el final de la vida ante el dolor irreversible.
“Durante más de diez años he convivido con enfermedades crónicas degenerativas que me han enseñado una verdad que me duele aceptar: en México, muchas personas mueren sin dignidad”, expresó con firmeza. A sus 30 años, Samara aclaró que su propuesta “no es una ley sobre la muerte, sino sobre la vida con sentido hasta el último aliento”, y que busca garantizar la libertad de decidir y el alivio del sufrimiento en los pacientes que enfrentan etapas terminales.
La iniciativa pretende reformar la Ley General de Salud para permitir la eutanasia o ayuda médica para morir, así como modificar el Código Penal Federal para que esta decisión no sea criminalizada. Decenas de legisladores han suscrito el proyecto, que busca colocar a México dentro del debate internacional sobre el derecho a morir con dignidad.
Martínez destacó que “hablar de eutanasia genera miedo, pero el miedo nunca ha sido buen consejero cuando se trata de derechos humanos”. Desde su experiencia como paciente, apeló a la empatía de los legisladores y a la necesidad de legislar “desde la humanidad y no desde la política”.
“Hoy en México hay pacientes que suplican alivio, familias que imploran paz, médicos que se enfrentan al dilema ético de no poder hacer más”, señaló. La activista pidió a los diputados no convertir el tema en una batalla ideológica ni partidista, recordando que “no se trata de partidos, ni de credos, se trata de personas”.
A lo largo de su intervención, subrayó que la Ley Trasciende representa “una deuda pendiente del Estado con quienes más han sufrido”. En su mensaje, pidió que el Congreso avance hacia una legislación que acompañe el final de la vida con compasión, respeto y autonomía. “Negar la posibilidad de una muerte digna no preserva la vida, prolonga el sufrimiento”, enfatizó.
Durante la conferencia también participó el senador Emmanuel Reyes, de Morena, quien respaldó la iniciativa e hizo un llamado a legislar con una “perspectiva laica, lejos de apasionamientos religiosos”. Reconoció que en el pasado “visiones conservadoras impidieron avanzar”, pero ahora existen condiciones sociales y políticas favorables para hacerlo.
Martínez concluyó su mensaje afirmando que esta propuesta “no es el final, sino el comienzo de una sociedad más justa”, e invitó a los legisladores a “hacer historia” aprobando una ley que, en sus palabras, “busca dignidad, humanidad y libertad hasta el último suspiro”.