El Congreso de la Ciudad de México aprobó una reforma para prohibir el cultivo de maíz transgénico y garantizar la protección de los maíces nativos. Con 382 votos a favor y 88 en contra, la iniciativa busca preservar la biodiversidad y la soberanía alimentaria del país. Ahora, el Senado deberá analizar y aprobar la medida.
La reforma modifica los artículos 4° y 27 de la Constitución para declarar a México como centro de origen y diversidad del maíz, enfatizando su importancia cultural y alimentaria. Se establece que el cultivo de este grano en territorio nacional debe realizarse sin modificaciones genéticas que superen las barreras naturales de reproducción.
Sin embargo, el documento permite el uso del maíz transgénico bajo condiciones específicas, evaluadas según criterios de bioseguridad y protección del patrimonio biocultural. Además, la reforma prioriza la biodiversidad, la soberanía alimentaria y el manejo agroecológico del maíz, promoviendo la investigación científica y el conocimiento tradicional.
La medida también ordena al Estado fomentar los cultivos tradicionales con semillas nativas, especialmente mediante el sistema milpa, optimizando el uso de la tierra sin transgénicos. Se fortalecerán las instituciones públicas encargadas de la investigación, conservación e innovación en la producción agrícola.
Un plazo de 180 días fue establecido para que el Congreso de la Unión armonice el marco jurídico con la reforma. Inicialmente, la iniciativa incluía una definición clara de maíz transgénico, pero esta fue retirada a solicitud de la presidenta Claudia Sheinbaum, generando debate entre legisladores.
Algunos diputados de oposición criticaron la reforma, argumentando que pone en riesgo la autosuficiencia alimentaria del país al restringir el acceso a biotecnología agrícola. Además, señalaron que México seguirá importando maíz transgénico para uso industrial y forraje, lo que podría afectar la competitividad del sector agropecuario.
Por otro lado, legisladores de Morena defendieron la medida, asegurando que la producción de maíz blanco, utilizado para consumo humano, está garantizada. También destacaron que la tecnificación de riego y las inversiones en el sector agrícola permitirán fortalecer la seguridad alimentaria del país.