En una noche que ha sacudido la política estadounidense y al mundo entero, Donald Trump se declaró vencedor de la elección presidencial frente a la demócrata Kamala Harris, quien apenas hace unos meses se sumó a la contienda como su principal oponente. Desde el centro de convenciones del condado Palm Beach, en West Palm Beach, Florida, Trump proclamó una victoria que, según él, es “una de las más grandes” en la historia de Estados Unidos. Acompañado de su familia y rodeado de seguidores entusiastas, el expresidente prometió llevar al país hacia una “era dorada”.
“Es un honor ser elegido como su 47º presidente y su 45º presidente”, declaró Trump, subrayando lo inédito de su regreso al poder tras su mandato de 2017 a 2021. Con una retórica triunfante y rodeado de gritos de “¡USA! ¡USA!”, el expresidente celebró los resultados parciales.
El actual presidente, Joe Biden, contactó a Trump para felicitarlo por su aparente victoria. En una muestra de unidad y respeto hacia el proceso democrático, Biden también invitó a Trump a la Casa Blanca para coordinar una transición pacífica. “La Casa Blanca coordinará una fecha en el futuro cercano para la reunión”, informó un portavoz presidencial, agregando que Biden se dirigirá a la nación el jueves para hablar sobre el impacto de estos resultados en su legado.
Kamala Harris, quien se incorporó a la campaña demócrata hace apenas tres meses, también llamó a Trump para reconocer la derrota. En una conversación que fue confirmada por fuentes de su equipo, Harris enfatizó la necesidad de “una transición pacífica y de un liderazgo para todos los estadounidenses”, en lo que muchos han considerado un llamado a la unidad en un país profundamente polarizado.
En su discurso, Trump delineó su visión para los próximos años. “No descansaré hasta que hayamos entregado la América fuerte, segura y próspera que nuestros hijos merecen y que ustedes merecen”, aseguró. De acuerdo con él, esta administración será el comienzo de “la verdadera era dorada de Estados Unidos”, un mensaje que busca apelar a la esperanza de sus votantes y a la promesa de mejorar la economía y la seguridad nacional.
“Haremos a Estados Unidos grandioso nuevamente”, proclamó entre vítores. A diferencia de su estilo combativo de campañas anteriores, Trump adoptó un tono más calmado, prometiendo “luchar con cada aliento” por los intereses de las familias y por un país “más seguro y próspero”.
El equipo de Trump asegura que, con 292 votos electorales proyectados por medios como CNN y NBC News, la victoria es casi indiscutible, a pesar de que algunos estados clave como Nevada y Arizona aún están pendientes de resultados oficiales. Con los resultados preliminares indicando una amplia ventaja sobre Harris, quien alcanzó 224 votos electorales, el regreso de Trump al poder parece asegurado, aunque algunos analistas señalan que el cierre de votos en ciertos estados podría presentar desafíos.
A nivel interno, la derrota de Harris ha provocado cierta incertidumbre dentro del Partido Demócrata, ya que algunos se preguntan si esta derrota podría presagiar una necesidad de reorganización en sus estrategias futuras.