En un nuevo episodio que agita la escena política y económica de Estados Unidos, el expresidente Donald Trump lanzó una exigencia directa desde su cuenta en Truth Social: la renuncia inmediata de Jerome Powell, actual presidente de la Reserva Federal (Fed). El mensaje fue breve, pero contundente: “¡El Tardón (apodo para Powell) debería renunciar de inmediato!”, acompañado por un enlace a una nota publicada por la agencia Bloomberg.
La publicación rescatada por Trump incluye críticas del director de la Agencia Federal de Financiamiento de Viviendas (FHFA), Bill Pulte, quien señaló que el Congreso debería investigar a Powell por supuestas inconsistencias durante su más reciente comparecencia ante el Senado. Las acusaciones de Pulte giran en torno a una posible falta de veracidad por parte del funcionario al momento de exponer los efectos de las recientes medidas económicas.
Jerome Powell, titular de la Reserva Federal desde 2018, fue designado en ese cargo por el propio Trump durante su presidencia. Posteriormente, fue ratificado en la administración de Joe Biden, con un segundo mandato que concluye en mayo de 2026.
Las tensiones entre Trump y Powell no son nuevas. Durante meses, el exmandatario ha incrementado la presión pública hacia la Fed para que se concrete una baja en las tasas de interés, las cuales actualmente se ubican entre el 4.25 % y el 4.5 %. Según Trump, este nivel impide un crecimiento económico más ágil y limita la expansión del mercado interno.
Por su parte, Powell ha sostenido en diversas ocasiones que las decisiones del organismo se basan en un análisis técnico del comportamiento económico nacional e internacional, alejadas de posturas políticas o partidistas. Esta postura volvió a ser reafirmada el martes pasado, cuando aseguró que aún no se observan efectos concretos de los recientes aranceles promovidos por la Casa Blanca.
Durante su comparecencia, también adelantó que un posible recorte en las tasas podría ocurrir en julio, aunque sin confirmar una decisión definitiva, lo que ha generado impaciencia en algunos sectores financieros y políticos.
La declaración de Trump ocurre en medio de un ambiente político enrarecido por la proximidad de las elecciones presidenciales, y donde cada movimiento en la política monetaria es observado con lupa por actores de todos los niveles. A pesar de los señalamientos, Powell continúa al frente del organismo rector de la política económica estadounidense.
Hasta el momento, no se ha emitido ninguna respuesta oficial por parte de la Reserva Federal ni del propio Jerome Powell respecto al llamado de Trump. Las presiones públicas y las tensiones entre el poder político y las instituciones económicas independientes mantienen su curso, en un contexto donde cada palabra puede mover los mercados globales.