El secretario de Comercio de Estados Unidos, Howard Lutnick, afirmó que los aranceles del 25% impuestos a México y Canadá podrían revertirse si ambos países logran frenar el tráfico ilegal de fentanilo. En entrevista con CNBC, Lutnick subrayó que esta medida no responde a una guerra comercial, sino a una «guerra contra las drogas».
El 2 de abril será una fecha clave en la política comercial estadounidense, pues entrarán en vigor nuevos aranceles recíprocos que afectarán a países con impuestos elevados sobre productos estadounidenses. Ese mismo día se discutirán estrategias para restablecer el comercio de manera justa, indicó el funcionario. Las medidas incluyen impuestos adicionales para el sector automotriz y productos agrícolas.
Lutnick enfatizó que la administración de Trump busca revitalizar la industria manufacturera estadounidense, especialmente en los estados de Michigan y Ohio. Según el secretario, estos estados sufrieron un impacto negativo tras la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en 1992. Con la transformación del acuerdo en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) durante el primer mandato de Trump, el gobierno busca ahora recuperar empleos en el sector automotriz y manufacturero.
«Vamos a recuperar esos grandes empleos y convertir a Estados Unidos en un centro manufacturero nuevamente», declaró Lutnick.
La imposición de aranceles ha sido una constante en la administración Trump. El pasado 4 de febrero, el presidente impuso un gravamen del 10% sobre importaciones chinas. Posteriormente, el 4 de marzo, entraron en vigor los aranceles del 25% para México y Canadá, además de un 10% adicional para China. A esto se sumará la entrada en vigor de nuevos impuestos sobre el acero y el aluminio el próximo 12 de marzo, con una tasa del 25%.