Un trágico suceso conmocionó al municipio de Tekit, Yucatán, cuando un joven de 21 años, identificado como Alejandro “N” y apodado “El Wero”, fue linchado y quemado vivo por decenas de personas. El hecho ocurrió luego de que se le señalara como el presunto responsable del ataque con un machete a una mujer de 69 años, identificada como María “N”, quien falleció a consecuencia de las heridas.
De acuerdo con la Fiscalía General de Justicia de Yucatán, el incidente inició la noche del lunes, cerca de las 9:00, cuando recibieron un reporte de un ataque “con un arma contundente” en la localidad. La mujer fue trasladada al Hospital Juárez, donde lamentablemente perdió la vida en la madrugada debido a la gravedad de sus heridas.
Tras conocerse el ataque, habitantes de Tekit identificaron al supuesto agresor y, enfurecidos, tomaron la justicia en sus manos. En las inmediaciones de la calle 30, un grupo de vecinos capturó al joven, lo golpearon, lo ataron y, finalmente, lo prendieron fuego. Según reportes, una patrulla de la policía local estaba presente durante el linchamiento, pero no logró intervenir para detener la agresión.
El caso ha generado indignación y controversia, tanto por el linchamiento como por las circunstancias que rodearon la muerte de la mujer. Las autoridades estatales, incluyendo personal de la Fiscalía de Yucatán y la Secretaría de Seguridad Pública local, han iniciado las investigaciones correspondientes para esclarecer lo sucedido y determinar responsabilidades.
Medios locales señalaron que el arma utilizada en el ataque fue un machete y que el presunto agresor era conocido en la comunidad. Sin embargo, la acción colectiva de los vecinos ha sido cuestionada, al tratarse de un acto de justicia por mano propia que terminó en la muerte de una persona sin un proceso judicial.
Este tipo de eventos resalta el problema de la desconfianza en las instituciones de seguridad y justicia en ciertas comunidades, donde la población, cansada de la impunidad, recurre a medidas extremas. Sin embargo, también pone en evidencia los riesgos y las consecuencias de este tipo de acciones.
El linchamiento de Alejandro «N» y el asesinato de María «N» dejan una profunda huella en la comunidad de Tekit, al tiempo que reabren el debate sobre la violencia, la justicia y el estado de derecho en México. Las autoridades continuarán con las investigaciones para esclarecer los hechos y garantizar que se respete el marco legal.