Este sábado, la Ciudad de México dio inicio a los festejos del Día de Muertos con el tradicional desfile de Alebrijes Monumentales, atrayendo a miles de personas al centro de la capital. Un total de 188 esculturas hechas de cartón y papel maché recorrieron la ruta que va desde el Zócalo hasta el Ángel de la Independencia.
Entre los alebrijes destacó el “Tlacuaxolota Libertad Turquesa”, creado por Personas Privadas de la Libertad del Centro Femenil de Reinserción Social Santa Martha Acatitla. Voluntarios de varios estados como Guerrero, Guanajuato, Hidalgo, Jalisco, Morelos, San Luis Potosí, Tlaxcala, Michoacán, Estado de México y la CDMX, participaron en la elaboración de estas imponentes figuras, algunas de más de dos metros de altura.
Los alebrijes estarán en exhibición pública sobre Paseo de la Reforma, desde el Ángel de la Independencia hasta la Estela de Luz, hasta el domingo 3 de noviembre. El Museo de Arte Popular (MAP), organizador del evento, otorgará premios de hasta 50 mil pesos a los tres mejores diseños.
Estos seres fantásticos tienen sus raíces en las creaciones del artesano Pedro Linares (1906-1992), quien los ideó en la década de 1930 tras soñar con criaturas formadas por diferentes animales. Con el tiempo, los alebrijes se han asociado al Día de Muertos por la creencia de que son animales que habitan en el inframundo.
El Día de Muertos, declarado en 2003 por la Unesco como patrimonio oral e inmaterial de la humanidad, es una de las tradiciones más importantes de México. En esta festividad, los vivos se preparan para recibir y convivir con sus difuntos.