La Fiscalía de Sinaloa confirmó el hallazgo de restos óseos en dos puntos distintos de Culiacán, resultado de una jornada de búsqueda encabezada por un colectivo de madres buscadoras, en colaboración con la Comisión Estatal de Personas Desaparecidas. Este nuevo descubrimiento se suma a una larga lista de casos que reflejan la crisis de desapariciones que enfrenta el estado.
Los restos fueron localizados en zonas apartadas de la capital sinaloense: uno de los puntos se ubica en los Campestres Huertos del Pedregal y el otro entre el camino al dique La Primavera y el camino a la Cohetera. Ambos lugares fueron resguardados por las autoridades mientras los equipos forenses realizaban el levantamiento del material encontrado. Aunque no se ha precisado el número de personas a las que podrían pertenecer los restos, las osamentas fueron trasladadas al Servicio Médico Forense para iniciar los procesos de identificación.
El hallazgo en Huertos del Pedregal ocurrió mientras el colectivo de madres realizaba una de sus jornadas de búsqueda, una práctica que se ha vuelto parte del día a día en distintas regiones de Sinaloa. Armadas únicamente con palas, varillas y esperanza, estas mujeres recorren terrenos baldíos, ríos secos y predios abandonados en busca de pistas sobre el paradero de sus seres queridos.
Este episodio recuerda los hechos de abril pasado, cuando el grupo Sabuesos Guerreras localizó seis fosas clandestinas con al menos once cuerpos en su interior, también en Culiacán. Aquella búsqueda comenzó a partir de un reporte anónimo y derivó en la intervención de la Fiscalía y la Comisión de Búsqueda del estado. Cada nuevo hallazgo, aunque doloroso, representa un paso más en el intento por devolver identidad y justicia a quienes han desaparecido.
La situación en Sinaloa continúa siendo alarmante. De acuerdo con el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas, en el estado se contabilizan 6 mil 876 personas desaparecidas. Municipios como Mazatlán han sido señalados como zonas críticas, donde los reportes de desaparición se han incrementado en los últimos meses, encendiendo las alertas entre autoridades y familias.
Con cada nueva búsqueda, los colectivos mantienen viva la exigencia de verdad y justicia, mientras las autoridades continúan con las investigaciones para identificar los restos hallados y esclarecer las circunstancias detrás de estos hechos. Los recientes descubrimientos en Culiacán no solo amplían la dimensión del problema, sino que también refuerzan la urgencia de atender la crisis de desaparecidos que golpea a Sinaloa y a todo el país.