La cúpula morenista solicitó el regreso del senador Ricardo Monreal Ávila, debido a la salida de dos senadoras de la bancada y la huelga de un senador que llevaba 15 días.
La falta de unidad y desacuerdos para desbloquear nombramientos pendientes también contribuyeron a esta decisión.
Monreal Ávila anunció su reincorporación a la actividad parlamentaria mediante una carta leída por el secretario en funciones de presidente, Daniel Gutiérrez Castorena.
Cuestionado sobre el retorno de Monreal Ávila, el senador morenista César Cravioto, vinculado al Grupo de los “ultras”, restó importancia al regreso, señalando que el senador tiene derecho a reincorporarse como cualquier titular.
Además, desestimó la posibilidad de que Monreal asuma nuevamente la coordinación de la bancada y la presidencia de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Senado, subrayando que es una decisión colectiva y no personal.
Eduardo Ramírez, actual líder de la bancada y presidente de la Jucopo, había anunciado que dejaría ambos cargos en enero para hacer campaña para la gubernatura del estado de Chiapas. Sin embargo, el regreso de Monreal cambió la dinámica interna.
La división en la bancada morenista se ha agudizado en las últimas semanas durante los procesos internos de selección de candidatos, evidenciándose con el episodio en el que la senadora marcelista, Martha Lucía Micher, expresó su intención de renunciar a Morena en el Pleno del Senado.
El senador Alejandro Rojas, suplente de Monreal, ha votado en contra de dictámenes favorables para Morena, reconociendo incluso el trabajo de la oposición en sus discursos.
Esto ha restado votos al oficialismo. La próxima semana, el Senado enfrentará la votación en el Pleno para designar a una nueva ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Ante la crítica de Rojas Díaz Durán a la terna propuesta, se anticipa otro voto en contra, lo cual representa un desafío para Morena, considerando que se requiere una mayoría calificada para esta elección.